Un conductor cayó en crisis nerviosa luego de que arrollara a un motociclista en la avenida Circuito Baluartes, pensó que le había quitado la vida
CAMPECHE.- Un motociclista resultó lesionado y asistido por paramédicos del Sector Salud luego de ser embestido por un distraído conductor el cual no respetó su alto en la avenida Circuito Baluartes, ante el hecho el responsable aceptó su culpa y cayó en crisis nerviosa ya que pensó que había “fulminado” al repartidor.
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El hecho ocurrió a las 00:40 horas, cuando un repartidor empleado de una farmacia se retiraba a su domicilio posterior de culminar con su jornada laboral, por lo que transitaba a exceso de velocidad pero en preferencia abordó de su vehículo Suzuki tipo 120 sobre la circulación de la glorieta de San Pedro.
Al estar entre la avenida circuito Baluartes y Gobernadores, el conductor del coche compacto de la marca Nissan línea Versa con matrículas DKE-33-75, no respeto su alto obligatorio, esto provoco que choque al “jinete” en el costado derecho y lo proyecté varios metros hasta quedar tendido a mitad de la arteria.
El responsable del accidente al escuchar los gritos de dolor de la víctima y luego hubo silencio, lo que causó que el responsable cayera en crisis ya que pensó que le había quitado la vida en tanto algunos ciudadanos intervinieron para tranquilizarlo y dar parte al número de emergencias.
Inmediatamente agentes estatales, turísticos y personal de rescate del Sistema de Atención Médica de Urgencias (SAMU) acudieron al llamado de ayuda, mientras los paramédicos le brindaron la atención prehospitalaria los policías cerraron uno de los carriles del tramo para evitar otro accidente.
Los rescatistas lograron estabilizar al joven repartidor, quien no presentó fractura alguna y solo tuvo algunos golpes que no ameritaron su traslado a un hospital, mientras el conductor del choque señaló que no vio al “jinete” motivo por el que no pudo frenar, sin embargo aceptó su culpa.
Por más de 30 minutos ambas partes entablaron una plática por el pago de los daños, lo que fue aceptado, esto hizo que el caso no sea turnado ante ninguna instancia de seguridad ni los coches remolcados a un deposito.
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